lunes, 1 de octubre de 2007

PERU: DIA MUNDIAL DEL HABITAT

De: "INFORMA: URBE-VIVA" - urbe_viva@yahoo.com
Fecha: Lun, 1 de Oct, 2007 2:51 pm
Asunto: PERU: DIA MUNDIAL DEL HABITAT

NOTA DE PRENSA

DIA MUNDIAL DEL HABITAT EN EL PERU CON CIUDADES ENLUTADAS, PERO CON ESPERANZA DE CONVERTIRSE EN CIUDADES SEGURAS Y JUSTAS

DIA DECLARADO POR LA ONU, EL 1º DE OCTUBRE DE CADA AÑO

El Perú recibe el día mundial del hábitat con el dolor de haber presenciado la destrucción del corazón de la ciudad de Pisco y con la preocupación de que otro centro histórico se pierda como es el caso del Centro Histórico de Lima, vulnerable a los azotes de la naturaleza y sin un programa de renovación y revitalización que lo ampare.

Ciudades como Lima, Pisco y las demás ciudades de nuestro territorio presentan problemas de déficit de vivienda a pesar de las políticas nacionales de vivienda últimamente emprendidas y que hasta hoy no la reducen significativamente.
DEFICIT HABITACINAL NACIONAL
Déficit de viviendas 2000 2005
Nacional 1’233, 000 1’502,248 (100%)
Cuantitativo 326,000 260,927 (17%)
Cualitativo 907, 000 1’242,321 (83%)
Fuente: Plan Nacional de Vivienda 2006 - 2015,Censo Nacional 2005, Convenio: ATN/CF–8508-RG, Comunidad Andina –BID, abril 2005 Elaboración: CIDAP, septiembre 2007

Frente a esta realidad tenemos paradójicamente que el crecimiento de la producción o stock de viviendas crece constantemente cada año, con cifras significativas (ver cuadro adjunto). Estas cifras indican que el 70% de la construcción de las ciudades urbanas, como Lima por ejemplo está hecha bajo “la producción social de las familias”, también denominada producción informal de viviendas, hecho que demuestra que la construcción de las ciudades está en manos de sus habitantes, y en muchos casos sin asistencia técnica, ni control urbano, con la posibilidad de ser “bombas de tiempo” o ciudades vulnerables de origen.

Stock de vivienda 1981 1993 2006
TOTAL 3’644.601 5’099.502 7’271.386
INEI, MVCS, CIDAP


Ante esta realidad presente en nuestras ciudades es importante resaltar el llamado de la ONU a tener CIUDADES SEGURAS Y JUSTAS. Motivándonos, nuevamente, a no ser indiferentes, por ello el CIDAP desde sus 29 años de trabajo en el HABITAT nacional e internacional, recomendamos y proponemos:

1. Que ciudades vulnerables a las diferentes amenazas, como Pisco, Lima y otras, que no contribuyen a la dignificación de sus habitantes, deben ser RECORD DE GUINES, de las ciudad con la mejor calidad de vida para todos, no sólo de escenario de obras frívolas, para ser un artefacto del mercado competitivo de ciudades en el mundo, sin importar el despoblamiento de sus centros, que las casas se desploman sin terremoto, así como su patrimonio, su memoria e historia se pierden por el sacarle el juego al suelo urbano con torres de cajitas de fósforos, llamadas viviendas y extensos arenales convertidos, en pampas de chozas para vivir, sin agua, por muchas décadas. Esta “PRODUCCIÓN SOCIAL DEL HABITAT”, que en cifras representan el 70% del área urbana, NO debe seguir siendo hecha sin asistencia técnica, sin control urbano, sin licencias, ser resultado de un dejar hacer, porque la “autoridad”, concibe que no “puede” ni debe hacer viviendas dignas.
2. Por ello la esperanza, que el Arq. Eduardo Figari, gestor en 1984, del Programa Especial Municipal Huaycán, realizado en esa época de manera concertada y participativa, y hoy integrante de FORSUR, pueda ser garantía, que las lecciones de esta experiencia en Huaycán, asegure una reconstrucción participativa, con la memoria urbana e historia de la población que debe ser fortalecida, en razón que este pueblo merece, que su historia patrimonial edificada, se restaure, se construya desde abajo, para dignificar la vida de sus ciudadanos .
3. La COOPERACIÓN INTERNACIONAL, verla como una oportunidad y alianza en estos procesos de hacer y/o rehacer ciudad, no como amenaza, competitiva con el empresariado nacional.
4. El Centro Histórico de Lima, así como otras ciudades nacionales e internacional, como Arequipa, Cuzco, Ayacucho, Quito, La Habana, debe tener una OFICINA o INSTANCIA DE MANEJO Y GESTIÓN de su CH, para orientar su accionar y salvaguarda, frente a intervenciones como los Programas Públicos: MEJORANDO MI QUINTA, para potenciarlos en su multiplicación, en todos los barrios tugurizados, así como la masificación del BONO de DESTUGRIZACIÓN, herramienta subsidiaria indispensable para dignificar la vida de sus habitantes.
5. En las ciudades como Pisco, Lima y otras, que tienen una significativa cifra de inquilinos empobrecidos, que habitan tugurios, es urgente la promoción de la destugrizacion y puesta en valor de CASONAS de propiedad pública y privada, como CASOS EMBLEMATICOS de salvaguarda de estos hitos históricos, del tejido social, cultural de sus barrios.
6. Nuestras ciudades con significativa, edad urbana, demandan urgente una legislación especial para la RENOVACIÓN URBANA, y protección de su patrimonio, sin exclusión y despoblamiento. Hay proyectos de ley esperando su dacion, especialmente la Ley General de Renovación Urbana, empolvada en los archivos del Congreso de la República.
7. El derecho a una vida digna, demanda el derecho a una vivienda digna, a un hábitat digno, que hoy nuestra Constitución política no la contempla, como en otras ciudades del Mundo la tienen. Las leyes del mercado hasta hoy han demostrado su incapacidad, para facilitar la vivienda para todos, por ello miles de familias siguen haciendo sus viviendas, por generaciones, como el ahorro familiar, que de un momento a otro, se les cae, porque no sabían como de debía de hacerse.

ANEXO:



Nota de Prensa - ONU
DÍA MUNDIAL DEL HÁBITAT


Las Naciones Unidas han designado como "Día Mundial del Hábitat" al primer lunes de Octubre de cada año, con la intención de reflejar el estado de los asentamientos humanos y el derecho básico de contar con un techo adecuado para todos. Es también una oportunidad para recordarle al mundo su responsabilidad colectiva por el futuro del hábitat de la humanidad.
La conmemoración mundial se llevará a cabo este año en la ciudad de La Haya en los Países Bajos. Otras importantes celebraciones se llevarán a cabo en Monterrey, México.
El tema escogido para este Día Mundial del Hábitat –a celebrarse el Lunes 1º de Octubre de 2007- es Una ciudad segura es una ciudad justa. Las Naciones Unidas han escogido este tema con la intención de llamar la atención y motivar la reflexión acerca de las crecientes amenazas que hay a la seguridad urbana y la justicia social. De manera particular se destacan al crimen y la violencia, los desalojos forzados e inseguridad en la tenencia del suelo, y los desastres naturales y los fomentados por los hombres.
El crimen y la violencia son una de las causas más significativas del miedo y la inseguridad en muchas ciudades de nuestros días. Entre 1990 y 2000, los incidentes de crímenes violentos se han elevado de 6 a 8.8 por cada 100,000 personas. Estudios recientes muestran que en los últimos 5 años el 60% de los residentes urbanos han sido víctimas de la criminalidad, siendo 70% en América Latina y El Caribe. Sea violento o no, el crimen claramente es una creciente y seria amenaza para la seguridad urbana en el mundo.
En tanto que el mundo se urbaniza cada vez más, es esencial que quienes hacen las políticas entiendan el poder que tiene la ciudad para catalizar el desarrollo nacional. Las ciudades tienen que ser capaces de proveer condiciones de vida incluyentes a todos sus residentes. Ricos o pobres, todo el mundo tiene derecho a la ciudad, a un entorno decente para la vida, a agua limpia, desagües, transporte, electricidad y a otros servicios. Cómo resolver esto es uno de los más grandes retos que enfrente la humanidad.
Otra amenaza significativa para la seguridad urbana en nuestros días está en los desalojos o erradicaciones forzadas y en la inseguridad en la tenencia. Desde todas las partes del globo se reportan regularmente incidentes de erradicaciones forzosas. A menudo ellas están relacionadas con operaciones buldózer de ocupaciones ilegales y tugurios en países en desarrollo, así como a procesos de renovación de poblaciones, de embellecimiento y de renovación tanto en países desarrollados como en países en desarrollo. Las erradicaciones forzadas han recibido mucha visibilidad en los últimos años debido en parte a que el derecho a no ser erradicado de manera forzada ha sido reconocido como un derecho humano fundamental al interior de la ley internacional de derechos humanos.
Los desastres, sean naturales u obra humana también son otra amenaza para la seguridad humana de nuestros días. La evidencia reciente sugiere que en todo el mundo se incrementa la frecuencia de los desastres naturales y los originados por las personas y que esta tendencia está relacionada parcialmente con el cambio climático. De 1975 a 2005 el número de desastres en el mundo se ha incrementado de 100 a 400 por año. El huracán Katrina, el Tsunami de Asia y el terremoto de Pakistán son algunos de los recientes desastres que han expuesto la clamorosa falta de preparación.
Combinadas, estas tres amenazas para la seguridad urbana colocan en la actualidad un reto muy grande tanto a los gobiernos nacionales como locales. Esta es la razón por la cual las Naciones Unidas han escogido el tema de Una ciudad segura es una ciudad justa para el presente Día Mundial del Hábitat.



Mensaje del Secretario General con ocasión del Día Mundial del Hábitat
1º de octubre de 2007


http://www.unhabitat.org/downloads/docs/5233_34075_K0763017s%20WHD%202007%20SGMsg.pdf


Nos encontramos en los albores de una nueva era urbana. La mitad de la humanidad vive ahora en pueblos y ciudades. Se estima que para 2030, las dos terceras partes de la población mundial habitarán en zonas urbanas.
En este momento crítico de la historia de la humanidad, varios estudios indican que la delincuencia en las zonas urbanas está aumentando de forma generalizada. Por otra parte, el miedo a la delincuencia es uno de los factores que más influyen en nuestra vida diaria. En demasiadas ciudades de todo el mundo, ese miedo determina el lugar que elegimos para vivir, comprar, trabajar y divertirnos. Esto es negativo para el progreso humano y para el desarrollo económico, especialmente en un mundo en que el número de habitantes de barrios urbanos marginales está a punto de superar por primera vez los 1.000 millones. En muchos países, la delincuencia ha dividido las ciudades en zonas deprimidas, por un lado, donde el uso de armas y la violación, el robo y la violencia son problemas comunes, y distritos prósperos, por otro lado, donde los residentes pueden permitirse una mejor protección.
En los barrios marginales y los distritos urbanos pobres, la población se ve afectada por la inseguridad de la tenencia de propiedades, y la falta de servicios públicos y de salud, y está más expuesta a los desastres provocados por el cambio climático. El Día Mundial del Hábitat de 2007 nos da una oportunidad para alentar a los dirigentes municipales a planificar mejor la reducción de la delincuencia, la seguridad de la tenencia de propiedades y la mitigación del cambio climático. Como indica acertadamente el lema de este día, “una ciudad segura es una ciudad justa”.
Ahora que ya hemos recorrido la mitad del camino hacia el logro de los objetivos de desarrollo del Milenio, aprovechemos la ocasión para examinar cómo podríamos mejorar la gestión de los asuntos urbanos. Muchas formas de delincuencia urbana traspasan las fronteras locales y nacionales, lo que exige una mayor cooperación entre todas las instancias de gobierno y la sociedad civil. Debemos invertir más en nuestros niños y jóvenes, especialmente en los que corren el riesgo de verse marginados y recurrir a la delincuencia como forma de escapar de la dura realidad que representan la pobreza y las privaciones. También debemos intensificar nuestros esfuerzos por ahorrar energía. Nuestras ciudades son los mayores contaminantes y, en consecuencia, requieren ideas grandes e innovadoras.
En este Día Mundial del Hábitat, tomemos la determinación de hacer de las ciudades del mundo lugares más seguros, verdes e incluyentes para todos.

Mensaje de la Directora Ejecutiva de ONU-Hábitat en ocasión de celebrarse el Día Mundial del Hábitat el 1º de octubre de 2007

http://www.unhabitat.org/downloads/docs/5234_92801_K0763022s%20Message%20of%20the%20ED.pdf

VIDEO MENSAJE: http://www.unhabitat.org/content.asp?cid=5230&catid=7&typeid=46&subMenuId=0

La delincuencia y la violencia de las zonas urbanas encabezan el programa de quienes están
comprometidos con el desarrollo urbano sostenible. Basta con preguntar a cualquier mujer: la delincuencia es la preocupación principal, el mayor temor de todos los habitantes de ciudades, especialmente de los barrios más pobres.
En el decenio transcurrido desde que ONU-Hábitat puso en marcha su Programa de Ciudades más Seguras, hemos observado que las ciudades de todo el mundo están demostrando un liderazgo más firme en cuanto a las formas de superar este flagelo y tormento de nuestra vida cotidiana. En consecuencia, ahora los gobiernos locales han asumido el reto de la seguridad y protección de las zonas urbanas.
Vivimos en un mundo de violencia inaceptable. Por ello, este año hemos elegido el tema Una ciudad segura es una ciudad justa, para conmemorar el Día Mundial del Hábitat.
Lo cierto es que mientras reflexionamos acerca de estas palabras, en todo barrio marginal de África, América Latina y el Caribe y Asia, y en la mayoría de las ciudades del mundo, se está acechando a alguien, acosando a una mujer, apuntando una pistola contra una persona, atacando a otra, asesinando a muchas más, y violando a innumerables mujeres. Se están saqueando casas y secuestrando vehículos. Ni siquiera los niños están a salvo. ¿Por qué?
En cierta medida, sabemos por qué: las investigaciones de ONU-Hábitat nos indican que actualmente en las ciudades vive más de la mitad de la humanidad. Al encaminarnos inexorablemente hacia esta nueva era urbana de nuestro planeta, se prevé que en la generación siguiente dos terceras partes de la población mundial vivirá en ciudades.
Al mismo tiempo, se estima que mil millones de personas viven en barrios marginales. Su número crece día tras día. Más de la mitad tiene menos de 25 años, y el 40% tiene menos de 19 años. Éstas son las principales víctimas de la pobreza. Pese a esta situación potencialmente explosiva, los problemas de los jóvenes de las zonas urbanas que viven en la pobreza prácticamente no figuran en las políticas y estrategias urbanas.
Estos hechos y cifras desoladores explican en parte por qué los jóvenes son tan vulnerables a los embarazos no deseados, los matrimonios precoces, la prostitución, el uso indebido de drogas, la delincuencia y el SIDA. La privación lleva a la desesperación, incluso al terrorismo. Por ello, estamos invirtiendo en los jóvenes y consultándoles.
Una vez más, puede preguntársele a cualquier mujer. En países de todo el mundo, se pierde capital social porque los espacios públicos de las ciudades son ocupados por pandillas o abandonados a causa del temor.
Los guardias privados y los grupos parapoliciales han asumido la protección de nuestras vidas y bienes; mientras tanto el Estado, incapaz de eliminar las causas fundamentales del delito y el desorden, a menudo opta por una retirada táctica.
La mayoría de los gobiernos reconocen ahora, a nivel nacional y local, que la seguridad urbana debe establecerse localmente, a partir del nivel de la calle, hasta incorporarse en la planificación local y nacional. No puede dejarse en manos de la policía únicamente. Los procesos de gobernanza urbana y las políticas urbanas que se ocupan de la exclusión, las desigualdades sociales, así como las medidas de planificación apropiadas, son decisivos para el éxito. Lo cierto es que la seguridad de la comunidad exige un enfoque integrado y coordinado.
Tenemos una nueva estrategia que se basa en las iniciativas de ONU-Hábitat de trabajar en estrecha cooperación con nuestras entidades asociadas. Se fundamenta en los tres pilares siguientes:
n En primer lugar, crear la capacidad para contar con estrategias locales de prevención del delito que tengan en cuenta el género y la edad, y que aborden las causas fundamentales del delito de manera integral e inclusiva.
n En segundo lugar, crear espacios urbanos más seguros, especialmente en el ámbito público, como centros de desarrollo social y seguridad.
n En tercer lugar, se necesitan más iniciativas de desarrollo urbano que tengan debidamente en cuenta la seguridad en todos los sectores.
Este programa es convincente y urgente, y contiene un llamamiento a determinadas entidades asociadas de las Naciones Unidas para que asuman el desafío de las zonas urbanas.
Si le queda alguna duda sobre su urgencia, pregúnteselo a cualquier mujer


Apoyo en la difusión:
SILVIA DE LOS RIOS
Lima, Perú

Telefono: 51-1-98664900
Email: delosrios.silvia@gmail.com

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