viernes, 6 de junio de 2008

Carlos Angulo: LA INFLACION

De: joo cesar - jocajoo1@yahoo.es
Fecha: Vie, 6 de Jun, 2008 11:24 am
Asunto: Carlos Angulo: LA INFLACION

En Blanco y Negro

Inflación

Carlos Angulo Rivas

Sin fijarse detenidamente en el sobrepeso, en la voluminosa fisonomía de Alan García algunos analistas políticos y la Universidad de Lima no saben como inflarlo un poquito más. Porque de estar inflado está hace rato y sobre todo a punto de reventar. Fíjense que desde el exterior y a la distancia el presidente Evo Morales se ha dado cuenta y sólo mirando las fotos y por supuesto las declaraciones mentirosas aunque rimbombantes de todos los días; y tanto que por decir la verdad uno de los ujieres de palacio, García Belaúnde, enojado ha llamado al embajador peruano en La Paz a manera de protesta. Vale, como dicen los españoles, pues ya no se puede decir la verdad en los oídos pulcros de su majestad y los mayordomos de la corte. Las únicas verdades válidas son las del exquisito y refinado gusto del gran líder, esas que le preparan los analistas políticos, los encuestadores y los adulones de toda laya en la prensa escrita, hablada y televisada. Mejor si son checos y comparten el platito de plata para suavizar la comida y la bebida. Ellos, los analistas, empezaron destacando la reducción de la pobreza del aprista Renán Quispe del INEI, un funcionario mediocre y cínico hecho a la medida del gran líder. No hablaron del alza de precios en las frutas, las verduras, el pollo, el pescado y de la carne que los pobres la ven una vez al mes; menos de la gasolina y el gas porque ello enoja al conductor y entonces envía a los periodistas a preguntar a sus patrones a ver si esas dudas y vacilaciones están permitidas, no vaya a ser que corran el riesgo de un despido. Total levantar el teléfono no cuesta nada.

Con las tres cuartas parte del país en contra del gobierno alanista, peor que Alejandro Toledo en sus dos primeros años, ahora resulta que el líder del extremismo neoliberal subió 6% en la aprobación ciudadana en Lima y Callao, dicen los encuestadores de lustrados zapatos de la Universidad de Lima. Claro, nada de empolvarse allá en los asentamientos humanos, ni en el medio rural, ni en las comunidades campesinas; tampoco en el sur del país y el oriente porque ellos, pobladores prehistóricos que no entienden la modernidad, son perros del hortelano, son bolivarianos con aquello de las Casas de ALBA y otras rarezas. Además no tienen teléfono. En realidad, la elitista Universidad de Lima carece de vergüenza, igual no la tienen los ayayeros del compulsivo megalómano y bravucón vendedor de las riquezas peruanas a precio de remate. Por lo menos a gran diferencia del analista checo, el director del diario Perú 21 sí se ha dado cuenta, pone el clavo cuando menos sin martillarlo, ubicando a García Pérez en el lugar que le corresponde; y prácticamente nos dice que el gran líder del neoliberalismo extremista está tan a la derecha, tan comprometido con los ricos, los que pagan los servicios en oro y en magníficas comisiones, que la otrora “candidata de los ricos” doña Lourdes Flores se ubica, hoy en día, en la centroizquierda. Paradojas de la política peruana frente a un Paro Nacional, en el mes patrio, que se viene con fuerza y apuntando a la cabeza.

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