Los diablos danzan en las cercanías de sabaneta en Barinas, Venezuela.

De: Walter Saavedra - ching_tien_tao@yahoo.com
Fecha: Dom, 29 de Jun, 2008 9:12 am
Asunto: Los diablos danzan en las cercanías de sabaneta en Barinas, Venezuela. Envio de Margarita Escudero

--- El dom 29-jun-08, Margarita Escudero - escuderomargarita@hotmail.com escribió:

De: Margarita Escudero - escuderomargarita@hotmail.com
Asunto: Los diablos danzan en las cercanías de sabaneta en Barinas
Fecha: domingo, 29 junio, 2008, 10:36 am



Los diablos danzan en las cercanías de sabaneta en Barinas

ABN 28/06/2008
Barinas, Barinas


Barinas, 28 Jun. ABN.- El pasado 24 de junio, día de San Juan Bautista, la comunidad de San Hipólito, en las cercanías de Sabaneta, municipio Alberto Arvelo Torrealba del estado Barinas, se contagió de alegría al presenciar, una vez más, a los Diablos Danzantes de esa localidad que lleva el nombre del santo domador de caballos.

Esta expresión popular de los Diablos Danzantes de San Hipólito,constituye uno de los sincretismos de fe religiosa más particular y con mayor arraigo en el estado Barinas, entidad, que cuenta a lo largo desu geografía con diferentes manifestaciones de carácter mágico-religioso.

Y es que los vecinos de San Hipólito y comunidades adyacentes,presenci an los bailes de los diablos, cada 24 de junio, como fecha de inicio; el 5 de julio (Día de la Independencia nacional), 16 de julio,celebració n de la Virgen del Carmen; 24 de julio, natalicio de Simón Bolívar y en las fiestas patronales de la comunidad, cada 13 de agosto.

Esta expresión dancística se origina aproximadamente en los albores del siglo XVIII y, desde entonces, se deja ver en ella, la participación de la comunidad en cada actividad emprendida, ejemplo de ello, el comportamiento social que se pronuncia en la cotidianidad.

Los Diablos asocian diversos factores o componentes tradicionales de variada índole, tal es el caso, de histórico, geográfico, etnomusical y cultural, en su más amplia acepción, constituyendo una expresión singular en el universo de manifestaciones estadales y locales.

El coordinador de esta cofradía, Brígido Vela, comentó que: “los días de celebración, en horas de la mañana, los cultores (bailadores o danzantes), nos preparamos para la actividad, nos ponemos de acuerdo en dónde nos vestiremos”.

Por lo general, se ubican en una de las casas que esté un tanto retirada de la multitud, en virtud, de que no deben ser identificados por los espectadores. Desde ese momento, les está prohibido llamarse por sus nombres, viéndose en la obligación de modular la voz, de modo de despistar a alguien que intente descubrirlos.

Los Cultores

Los Diablos Danzantes de San Hipólito están compuestos por un grupode 16 miembros, en edades comprendidas de los 10 a 60 años, en ellos,existe un nivel jerárquico de acuerdo al tiempo que tengan danzando en la cofradía, aunque esto puede variar en algunos casos dependiendo delas habilidades en cada una de las jornadas.

Existe una primera congregación, compuesta de diez diablos tejedores (cinco vestidos de diablos y otros cinco de diablas), un diablo viejo y una diabla vieja, además de cuatro músicos), para un total de dieciséis, todos del sexo masculino.

Vela señaló que los diablos tejedores son aquellos miembros que están más nuevos en la agrupación y, los diablos viejos son los más experimentados, éstos últimos tienen a su cargo la organización del grupo.

“Yo tengo aproximadamente 36 años en los diablos danzantes, primero salía de diablo tejedor, después salía de diablo viejo y después me instruí en la música, eso lo aprendí de mi padre que también era músico”, dijo Vela.

Los integrantes de esta cofradía, residen en San Hipólito, otros en menor grado en comunidades vecinas, como Los Rastrojos y Sabaneta.

¿Cómo danzan los diablos?

Luego que los diablos están vestidos y su identidad está debidamente oculta, su primer paso consiste en emprender una carrera a toda velocidad y en grupo por la calle principal del caserío, para luego dispersarse. Esto significa su llegada, un llamado a los espectadores para que presencien su danza.

Ubicados en el lugar del baile, colocan una “vara de balzo”,implemento que sostiene un voluntario de la comunidad. En ese momento los diablos tejedores toman el extremo de cada una de las diez cintas y se disponen alrededor de la caña, colocándose intercalados por sexo en forma secuencial, este paso se asemeja al conocido Sebucán.

A poca distancia de esta alineación, se encuentran los músicos,quienes esperan la señal de parte del diablo viejo para iniciar la música y la danza en forma sincronizada.

Una vez iniciada la danza del tejido, al compás de la música, el diablo viejo y la diabla vieja, giran en pareja alrededor de los tejedores para observar el buen entrelazamiento de las cintas en el báculo, así como también cuidar que ningún espectador entre a molestar o perturbar la labor de los diablos menores.

Si ocurre un error, serán castigados con el mandador (especie de rejo hecho de un palo de 50 centímetros aproximadamente) por los diablos viejos.

Al culminar el tejido, el voluntario que sostiene el palo, da la señal a los tejedores, de danzar en sentido contrario, con el fin de regresar las cintas, lo que se conoce como destejer. Al finalizar este paso, sueltan las cintas y comienzan a bailar en parejas alternándose con algunos espectadores.

Para la ejecución del bailoteo, cuentan con dos implementos necesarios, la vara y el mandador.

Vela sostiene que la vara de balzo (en referencia a una planta que abunda en la zona), “es ideal porque es liviana y debe medir 4 metros con 50 centímetros de altura y de su extremo superior cuelgan 10 cintas de variados colores, las cuales tienen la misma medida del palo a tejer”.

El mandador representa otro implemento de la danza y, es muy usado en los llanos venezolanos. El diablo lo utiliza para infundir respeto entre ellos y ante el público observador.

¿Y cómo es el vestuario de los diablos?

Estos diablos de Barinas, usan una vestimenta muy singular, el cual está compuesta de: pantalón y camisa, para los diablos y falda y camisa para las diablas. A este vestuario le agregan elementos esenciales para su vistosidad y colorido, como trozos y flecos de telas de varios colores, para dar mayor realce a sus movimientos al momento de danzar.

“El vestuario de nosotros lo mandamos a hacer de tachones decolores verde, amarillo, rojo, negro, azul, (tonos fuertes) y después le pegamos tiras para obtener un mayor colorido”, resaltó Vela.

Otros de los accesorios utilizados, son guantes y medias, además,calzan alpargatas y sobre su cabeza se colocan un atuendo o gorro adornado con largas tiras de tela, que al igual que la máscara, guardan la identidad del cultor.

Así como el vestuario, la máscara es un elemento notorio en esta cofradía, la cual es elaborada con tapara o totumo, de modo de aprovechar los materiales naturales de la localidad, usado comúnmente por agricultores llaneros en la elaboración de diversos accesorios.

En los diablos de San Hipólito se diferencian tres tipos de máscaras, las de las diablas están pintadas con tonos claros y las degradaciones del rojo y rosado en las mejillas para asemejar un maquillaje; los diablos tejedores con colores oscuros, generalmente negro y marrón.

Mientras que la máscara del diablo viejo es totalmente negra y con dos cachos rojos, además posee una barba y bigotes hechos con cerdas de ganado. Este aspecto hace al diablo viejo, que sea respetado por los demás miembros de la cofradía.

Al son de la música danzan los diablos…

La música ejecutada para la festividad de los diablos danzantes es netamente instrumental y sirve para apoyar el baile. En San Hipólito,el conjunto de músicos que acompaña a los demonios bailarines, son integrantes de la cofradía y para ello usan: el cuatro, la guitarra, la mandolina y las maracas.

La coreografía de la diablada es acompañada por tres géneros pertenecientes al folklore venezolano, como son: la polca, el merengue y el joropo.

Los instrumentos y géneros musicales que están presentes en esta danza sin lugar a dudas son tomados directamente de las costumbres dela región, en virtud, de que no existe la influencia de elementos extraños, ajenos al entorno, es decir, son cotidianos.

La próxima presentación de los Diablos Danzantes de San Hipólito está pautada para el venidero sábado 5 de julio, cuando se cumplen 197años de la Independencia de nuestro país del yugo invasor.